Para nadie es un misterio el complejo año que vivió especialmente el sector de la construcción durante el año 2022, afectada fuertemente por el alza en el costo de los materiales, una situación llevó al gobierno del Presidente Gabriel Boric, a aplicar medidas excepcionales, como el reajuste retroactivo al precio de los contratos de obras públicas que ya estaban en ejecución, y que en muchos casos se vieron paralizadas, ante el riesgo inminente de quiebra de diversas empresas.
La medida que en la región de Ñuble fue anunciada el 11 de noviembre del año pasado, día de su entrada en vigencia, se mantendrá vigente hasta el próximo 31 de marzo, beneficiando a los contratos que se encuentran en ejecución, y según estimó el Ministerio de Obras Públicas, tiene el potencial de impactar a 1.400 contratos a nivel nacional y 61 en Ñuble.
A dos meses desde que se abriera la ventana para que las empresas contratistas soliciten los reajustes retroactivos, desde la cartera que lidera en Ñuble el seremi Paulo De la Fuente, detallaron el impacto que ha tenido la medida excepcional, que forma parte de los compromisos de reactivación económica desde el Ejecutivo.
Según explicó De la Fuente Paredes, “al 10 de enero ya hemos aprobado pagos por un total de 13 contratos, que abarcan en total a 12 empresas, las que han ingresado a las distintas direcciones del MOP. A menos de dos meses que nuestro ministro Juan Carlos García, dio a conocer las medidas de apoyo a las empresas constructoras para proteger las obras y a las 30 mil personas que trabajan en ellas, más de un tercio de los contratos de obras públicas que se encuentran en ejecución han solicitado el reajuste excepcional retroactivo. En total las solicitudes suman más de mil 23 millones de pesos”, señaló el seremi Paulo De la Fuente, al realizar un balance de la medida.
Cabe recordar que, según el decreto, los contratos que pueden ser reajustados retroactivamente no deben contar con una resolución dictada que designe la comisión de recepción única o provisoria, así como tampoco las obras pueden haber sido abandonadas en forma unilateral, ni haber dado término anticipado al convenio, entre otras.
García agregó que “cada una de las solicitudes que nos han llegado debe ser analizada para evaluar si cumple con los requisitos, luego se firma un convenio y se aprueba la resolución que permite el reajuste excepcional para el contrato”.
La mayor cantidad de solicitudes se han realizado desde la Dirección de Vialidad, con 7 contratos, entre ellos obras como las conservaciones globales de caminos o la reposición de la ruta N-59-Q Chillán-Yungay; le sigue la Dirección de Obras Hidráulicas con 5 convenios entre los que destaca el Plan Maestro de Aguas Lluvias de Chillán y la Dirección de Aeropuertos con uno, la obra de conservación de la pista principal. Cabe recordar que, el denominado polinomio retroactivo excepcional involucra recursos por $350 mil millones para el Fisco, o unos US$380 millones.
Finalmente, el seremi De la Fuente detalló que “el 2022 fue un año complejo para la construcción, por los efectos de la pandemia y el escenario internacional, y en ese escenario, nuestro Ministro Juan Carlos García presentó una serie de medidas para proteger los cerca de 30 mil empleos que se generan a través de los contratos con el MOP, entre ellos, el reajuste de precios a los contratos firmados desde agosto de 2022 y que se extiendan por más de seis meses, donde ya el 41% de nuestras licitaciones a nivel nacional, tienen este reajuste incorporado”.